Hoy he salido a mi balcón, amo esta Tegus con su sexy descuido y sus heridas mal cicatrizadas, con sus Xibalbastars, me refiero a los auténticos, no a los fantoches que se disfrazan con ideologías llenas de esteroides y antidepresivos. Bostezo y me siento meraV; hay pocos políticos, celebridades, humanos, animales y cosas que tienen mi atención, ¡vaya factor kitsch! Por ejemplo, mi atención se centra en ese álbum de los Fontaines D. C. que me transporta a un gigante ritmo sutil y universal en el que estoy en el estadio del West Ham United coreando: Money is the sandpit of the soul, money…
¿Eh? ¿Esos británicos qué putas tienen? Recuerdo mis días en Londres inhalando #lagorda en fiestas pomposas, digo #lagorda y hasta escalofríos me dan. ¡Uf! ¡qué decir!, jodiendo con dañadas british girls, qué encanto y sutileza cantar con ellas en el London Underground, vagabundeando con los putos hooligans… y no digamos las parties con los publicistas… en fin, ahí era rey gracias a que Chicharito juega ahí. Se preguntarán cómo, bueno, fue gracias al regordete Jake. Un día caminaba por una tienda de abastecimiento Tesco y me lo encontré junto con su gang, lo que me llamó la atención fue la blancura de sus sneakers.
—Where are you from, mate? —me preguntó enigmáticamente Jake y atrás de él observé las caras frías de sus amigos.
—Honduras —le respondí sonriendo.
—Is Mexico? —preguntó titubeando.
—No —respondí pausadamente.
—Shut up, you cunt —gritó al más alto de su pandilla y continuó: But sounds like Mexico for me, mate! —hizo una pausa y dibujó una sonrisa que me recordó al Joker.
—You are the Chicharito’s cousin, mate! —carcajeé y enseguida me dio una cerveza Foster.
—Indeed. —respondí, pensando en qué otro país tenés que borrar tus propios copyrights y dar unos nuevos o similares. En mi caso, no voy a perder tiempo en explicaciones, es un peso muerto. Se me viene un ejemplo como cuando le borrás los copyrights a las canciones y se los ponés de nuevo con Audacity para subir un vídeo en el Facebook, ja, ja, ja, pero como les dije anteriormente, hay cosas, personas y lugares que no tienen mi atención, no iba a ponerme a discutir con el Jake si era mexicano u hondureño; él tiene su estructura y querer sacarlo de su sistema es como sabotearme a mí mismo… living the dream, ¡ajúa, tequila! Jake estaba kaput, pero tenía su encanto como el sexy descuido y las heridas de mi Tegus.
Necesitaba un amanecer así. Ayer me encontré a unos tipejos hablando como yo, hablando de libros que yo posteo en la red social y diciendo mis frases, je, je, je, les gusta espiar, pero no saben hacerlo bien; subís un vídeo y ves el counter de likes y views, je, je, je, obvio, al final a quién le importa, a sus padres, hermanos, amigos, qué lugar tienen o tendrán en el mundo; en una tienda de despensa familiar son reyes y reinas, valeP. Un par de canciones más para el soundtrack de mi vida.
Ayer me embriagué. Mister Pistolín me llamó, entonces fui a visitarlo. Me comentó que iba para Estados Unidos, que su nuera estaba por parir; el punto es que quiere que le maneje su campaña y como siempre, se puso pedo, puteó a su mujer, la abofeteó y le gritó ¡aquí mando yo, no jodás! Le dije que el miércoles de no sé qué año le daría mi respuesta y me marché.
Regi también me llamó, estaba high, me decía que había probado la viagra porque su marido ya no la estimulaba. Lo hizo, pero su marido no le aguantó, estaba horny, sí quería fornicar con ella, je,je, je… Sin palabras, pensé. Dijo que tenía toda la parafernalia para que me sintiera cómodo, #gutshit, #chocolates, #viagra… pero pienso que esa parafernalia es la que a ella le gusta, no a mí, fuck it!, mi pene es único, no se lo meto a cualquiera. Ella me cae bien. Mide 1.70 metros y pesa unos 60 kilos. Sus medidas son de 85-60-86. Fue modelo guapísima, pero sus mentoras —las Kardashians—olvidaron mostrarle que la mayoría de los hiphoperos del tercer mundo no tienen money, solo son mota y edecanes de cervezas que terminan explotando; no son lo mismo que en EE. UU. Nunca me creyó que las Kardashians no son pendejas como lo hacen creer, tienen buen feedback y analistas VIP que les buscan sus galanes de turno. En sus condiciones está que sean feos y que no tengan tanta plata como ellas. Es una técnica para que ellas parezcan diosas ante ellos con eslóganes de independencia y matriarcado. En fin, el marido de Regi (hiphopstar), hijo de un exministro que se mandó a operar el orto para poder seguir dándoselo a sus chiquis, es un gay depravado y underground. Este exministro también es pastor y su gran iglesia es cuna del lavado; fue desterrado de aquel gobierno por sus apetitos y fetiches sexuales: hacía sus orgías irrespetuosas dentro de la Casa Presidencial. ¿Que cómo me di cuenta? El cheque que le di fue a parar a una clínica especialista para los titanes del mundo gay.
Pienso que Regi es un espécimen en peligro de extinción, es una artista de apropiación, al conocerla inmediatamente te roba la personalidad y hace un collage con ella, y a los artistas buenos los arruina dándole halagos con veneno: está dañada hasta la médula, es la imagen de los grupos feministas de aquí. También me dice: el mundo del arte, bueno, la mayoría de los artistas de aquí son haraganes, cimarrones, buscan lo fácil en abundancia, como dicen, el sentimentalismo vulgar y manipulador. A mí me gusta invitar a esos artistas, me gusta ver cómo me venden su pobre alma por una caguama o por un trago, cómo venden sus secretos por una caguama o un trago, qué lindo verlos así, sin control, sometidos. Sabés, dale todo a un niño y lo arruinás; pasá invitándolos siempre, creales esa necesidad, poneles tu kitsch y a los años desaparecé, ¿qué hacés de ellos? ¿En qué se convierten? Ji, ji, ji, mon ami… ji, ji, ji… se convierten en un enorme niño deforme con un retraso mental enorme. No aprovecharon su juventud por estar pensando quién los iba a invitar, siempre se sintieron damnificados, pero cuál fue la causa; ellos dirán nacimos pobres, ji, ji, ji, y no es así, el huracán fue que se dejaron invitar, la invitación, ojo, es uno de los flagelos más peligrosos en el tercer mundo. Estos llegan a viejos y están entre lloriqueos y arrepentimientos, como tú dices, la pobreza es un estado mental, si no, esos taxistas brujos no existieran. La vez pasada se la chupé a uno, por cierto.
Oh Regi letal je, je, je, ella calma su ansiedad dando clases de francés a adultos que sueñan, como último escape, vivir en Francia. Es la mejor amiga de Mishy. Ella cree que aquella noche la forniqué. Lo que hice fue el truco de fratboy y birdbox: le vendé los ojos y apagué la luz; me ayudó mucho que ella andaba hasta la pinga en drugs y alcohol, le susurre shhh e hice que entrara el Omar.
—Oui, touche-moi jusqu’à que je me perds entre tes mains…
No sé por qué estoy recordando a la Regi, tiene un fuerte magnetismo, pienso que su espíritu anda por aquí: me lo infiltró. En fin, qué hermoso sol se siente en este puto balcón. Me gusta este barrio marginal llamado Honduras: maras políticas, maras de la calle, ponga, locura, caos, haraganes, políticos criollos, políticos de estanco, carnavalitos, hippies a huevos, chavalitos sin ruta y emocionalmente online; milfs en busca de carnavalitos, milfs clase media en busca de narcos de turno, millennials con ecosistemas contaminados con tantos displays, Netflix, visores, plays, downloads, etcétera… ¡Ah! y los chavorrucos en futuro nahuatl, artistas fatalistas y nada auténticos y los suicidios, el menú favorito de la muerte. Me gustaría que la eutanasia se aprobara. Un día se la planteé a Dientes de burro, pero se enojó y me dijo que con las leyes de Dios no se jugaba, que yo era el diablo. Es un país del pijín por hail Satán, y ahí es donde se concentra el poder. La pobreza es mental sin lugar a duda, lo que pasa es que los chicos de la ciudad son cimarrones. O. Henry tenía razón: Banana Republic. Si le dan un millón de lempiras a cada persona, ¿cuántos emprendedores habría y cuántos, con ese millón, se endeudarían en 10 millones por mierdas al crédito para creerse que son de la élite? Ja, ja ja, de la élite corrupta. Por eso esos árabes no innovan, por eso hasta gula tienen de su propia carcajada de ver tantos pendejos. Ayer, por ejemplo, un chico me pidió dinero para el taxi, me dijo que lo habían asaltado bla, bla, bla. Sé que es un artista drogadicto, pero yo andaba de buenas y le di suficiente como para un festín. Fijo compró drogas y se bebió el pisto y en su gravedad, fijo les dijo a sus amigos ese mae es pije gay, o pendejo y a las horas volvió a pedirme más, ¿quién creés que ganó? ¿él o yo? Pónganlo de este lado, que yo era EE. UU y él era de Honduras o que yo era la droga o su lagarto de Komodo. Por eso aquel congresista gringo dijo: es más barato comprar una mula que un diputado catrachito, y es verdad, lo veo a cada rato. A veces salgo para darle y poner patas arriba el ambiente. El alucín es un capricho, es como el agua que vez en un oasis en el desierto, es un kitsch como el arte que hace Regi. Regi me dice que la gente de aquí tiene cubiertas las paredes de su interior con stickers y tattoos de todo lo que ven, que en síntesis son los programas de tv de aquí: lo más ruin del panorama. Y que no son millennians los de aquí, sino #hchboys.
Ahora entiendo. Veo que Mister Pistolas los tiene adoctrinados, los tiene hipnotizados y apendejados. La mayoría carece de una figura paterna, tuvo mala crianza y mal feedback. Recuerdo a aquel artista que en una borrachera me dijo: es que yo miro a Mister Pistolas como el papá que nunca tuve. Nació para que lo hagan verga, pensé. Miran a Mister Pistolas como su apóstol o su papá pitufo; también son sus máximos groupies. En este momento me imagino el tattoo de Morazán de Mister Pistolas, seguro está festejando en New York, EE. UU. la venida de su sexto nieto, pero los compas lo festejan como feria de pueblo y fantasean que será el nuevo Mesías: el niño anti-imperio nacido en el imperio. Es tan fácil moldearlos y tocarles el umbral de su inconsciente, más con las redes sociales. Como les dije anteriormente, me dedico a poner y quitar presidentes, uso una máscara virtual y una social. ¡Ah! por cierto, ahora tenemos bares lights, cerveza cara e imágenes del Ché y Fidelito en tazas de porcelana. Estos bares son más bonitos que aquellos que tienen las tazas de porcelana de Trump y Adolfito. Ya me aburrí, ya se fueron los rayos oblicuos del sol.
Entro, me pellizco y veo mi depa. La voz de Regi por fin se esfumó. Pienso en Rita, en su manera de bailar y festejar, la veo como un holograma, pienso que estoy loco; ella se me acerca y me murmura que tu mano derecha no mire lo que haga la izquierda, sonrió la derecha, camina con Xanax & th y sus brazos andan un adolescente con ideología de la izquierda con esteroides y con 50 pesos en sus bolsillos. Rita se me acerca y me pregunta ¿qué personaje te gustaría ser? A mí me gustaría ser como el flautista de Hamelin, le respondo. El narcisismo del poder es hermoso, sentencia y desaparece, y digo, pero soy un semienmascarado Bian Lian, no soy el primo del Chicharito como pensó Jake, pero funcionó bien ja, ja, ja, rubish, me digo, y me doy cuenta de que ahora me pegaron ganas de una cerveza Foster, mate, y grito ¡aquí está tu Narrenschiff*!, me sorprendo al verla salir desnuda de mi habitación, es Regi y no tengo ni puta idea de qué hace aquí.
*nave de los necios o de los locos.
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