Un exoficial de caballería confederado, el mayor Abednego Greenberry Malcolm, era el líder de treinta familias migrantes del sur que fundaron en SPS una comunidad de expatriados en la primavera de 1867, nombrándola Ciudad Medina en honor al presidente recién elegido del país (Medinón), lo que podría denominarse el primer experimento de ciudad modelo en Honduras.

El grupo pertenecía al derrotado ejército de los esclavistas del sur de los EEUU, principalmente militares y políticos. Justificaron que deseaban «encontrar en éste lo que hemos perdido en nuestra propia tierra natal, la libertad. Hacer de éste lo que era nuestro país antes de que fuera destruido por nuestros enemigos».

A cambio, ofrecieron a los hondureños: «defenderlos con nuestras vidas de la invasión extranjera y cumplir con nuestro deber para con nuestro país de adopción». Así, mediante carta fechada el 3 de mayo de 1867, el exoficial pidió que se les otorgara una serie de privilegios y concesiones.

Mayor Green Malcolm de la 1ra. Caballería de Tennessee de McNairy. Educado como médico en Europa. Foto extraída del Flickr de Woody Coleman.

Entre sus peticiones estaban la concesión de tierra, un puerto libre en Puerto Caballos (ahora Puerto Cortés) durante tres años, para beneficio exclusivo de la colonia; la navegación exclusiva de los ríos Chamelecón, Ulúa y sus tributarios por diez años; derecho a construir carreteras a través de tierras públicas y particulares para beneficio de la colonia y del gobierno.

De igual modo, pidieron tener el privilegio de elaborar sus propios reglamentos municipales de conformidad con las leyes de la República y el privilegio de organizar su ciudad adyacente a San Pedro, eso sí, separada de esa ciudad y nombrarla la ciudad de Medina.

Finalmente, todo el privilegio de establecer fábricas para la confección de prendas de lana y productos alimenticios en la República por diez años; poder introducir exclusivamente durante cinco años vagones, carros y carruajes, la máquina de coser común, lavadoras de todo tipo con máquinas para fabricar artículos de hojalatería, además, poder destilar sus propios licores.

José María Medina Castejón (1826-1878), apodado Medinón fue un político y militar hondureño con el grado de capitán general que llegó a ser el primer presidente de Honduras como república y ejerció ese puesto en siete ocasiones. Fue fusilado durante el gobierno de Marco Aurelio Soto. Foto del muro de Facebook de Ludwing Varela.

Cinco días después, el gobierno en un acto reprochable y servil reconoce tácitamente como ciudadano y nombra al neofilibustero Green Malcolm como Inspector de la Inmigración estrangera (sic) «en consideración de sus aptitudes y buenos deseos de prosperidad del país».

Casi nueve meses después, el 19 de enero de 1868, otro filibustero, Charles Swett, arribó a costas de la Honduras Española. Venía de la Honduras Británica donde había visitado algunos de los once asentamientos Confederados. Seis días después, el presidente hondureño decretó todas las concesiones en favor de la colonia de exiliados.

Pero Swett no estaba impresionado con lo que se había logrado en ese tiempo. Hartman Strom y Stirton Weaver dicen que «a Swett no le agradaba mucho el Mayor Green Malcolm» o, posiblemente, estaba «defraudado por el estilo de mano dura» del exoficial y médico nacido en Kentucky.

Lo que no queda claro, sin embargo, es por qué él abandonó la colonia en 1870 con su mujer y sus dos hijos, justo el año en que un ferrocarril conectaba SPS con la costa norte. Una descendiente señala que «los cuatro enfermaron en Medina, ninguno de los cultivos familiares tuvo éxito y el gobierno hondureño incumplió algunos compromisos».

Si bien el gobierno ofreció incentivos generosos a los inmigrantes confederados, la colonia no duró más allá de principios de la década de 1870. El cónsul estadounidense en Omoa, Trujillo y Ruatan (sic) escribió en 1875 sobre los exinmigrantes confederados en Medina y sonó como que la comunidad se había disuelto o durado poco.

Afirmó además que «los ex Confederados ‘se dedicaban a la siembra de algodón, pero un insecto para ellos desconocido destruyó el algodón cuando estaba casi listo para cosechar y los dejó sin un centavo. Su situación se describió como angustiosa. La gran mayoría de ellos finalmente [sic] trabajó y suplicaron para regresar a sus hogares, los pocos que permanecieron dedicados a otros negocios, y lo están haciendo muy bien’».

Fotorretrato de William Allen Coleman subida al sitio web findagrave.com por Roy y Robyn Adair.

Pero, ¿qué pasó después de la colonia de Medina? La familia Coleman fue una de las exconfederadas más importantes que se quedaron en Honduras. William Allen Coleman (1838-1917) y su hermano John Henry Coleman (1840-1932) se unieron al grupo de Green Malcolm para venir a Honduras después de la guerra.

William Forrest Coleman (1864-1944) en un fotorretrato probablemente de los años 20 agregado por Roy y Robyn Adair en Find a Grave.

William Allen Coleman prosperó: construyó negocios exitosos en aserraderos, azúcar y bananas. Tuvo dos hijos. Uno de ellos, William Forrest Coleman, se casó con la santabarbarense Yndalecia Paredes. De hecho, encontré algunos descendientes pateplumas en Facebook. Téngase en cuenta que San Pedro Sula durante toda la época colonial siempre perteneció al partido de Tencoa, hoy Santa Bárbara. Entonces, se emparentaron con la élite de la época.

Yndalecia Paredes (1865-c. 1900), foto agregada por Roy y Robyn Adair.

Como bonus, a los descendientes de esta pareja se les atribuye haber traído a SPS el primer auto en 1907, asimismo, fueron dueños del primer teatro sampedrano. Hay mucho más por contar, pero como dijo mi ex:

Hasta acá llegamos.

Primer carro, de marca Ford, introducido en SPS por la familia Coleman Paredes en 1907. Foto propiedad de Jose Gonzalez Paredes.

Bibliografía:

Swett, C. A trip to British Honduras, and to San Pedro, Republic of Honduras, New Orleans: 1868

Harman Strom, S. & Stirton Weaver, F. «Confederates in the tropics: Charles Swett Travelogue», Univ. Press of Mississippi, Google Books

Powers, Michael, «From Confederate Expatriates to New South Neo-Filibusters: Major Edward A. Burke and the Americas» (2012).
All Theses. 1487.
https://tigerprints.clemson.edu/all_theses/1487


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